Day 10 of 40 (Español abajo) "On January 29th, while hiking with the Samaritans, we found dozens of slashed and empty water bottles along different remote trails in the desert. The water had been left in remote locations so that those in distress might come across the very thing that would save their life. Someone else, likewise, had taken the same level of extreme physical effort to hike out to those remote locations simply to slash the water bottles that had been left, ensuring that if someone in distress came across them they would find empty bottles rather than life-saving water. When we hear about family members who are missing, and women like Nancy who lost her life in the desert, it is hard not to wonder what would motivate someone to take take such effort simply to deny water to the dying. In the desert, Jesus hungered, and on the cross he thirsted. Some of the last words of Jesus Christ were, “I thirst”. Then, John 19:34 tells us, that after Jesus died, "One of the soldiers pierced his side with a spear, and immediately blood and water flowed out."
Día 10 of 40 "El 29 de enero, mientras caminaba con los samaritanos, encontramos docenas de botellas de agua vacías y cortadas a lo largo de diferentes partes en el desierto. Habían dejado las aguas lugares remotos para que aquellos que cruzaran pudieran encontrarlas. Un trago de agua puede hacer la diferencia entre la vida y la muerte para las personas cruzando la frontera. Alguien más, de la misma manera, había tomado el mismo nivel de esfuerzo físico para cortar las botellas de agua que habían quedado, asegurándose de que si alguien en apuros las encontraba, las botellas estarían vacías, que en unos casos provoca la muerte. Cuando escuchamos acerca de miembros de de familia que están desaparecidos, y de mujeres como Nancy que perdieron la vida en el desierto, es difícil no preguntarse ¿qué es lo que motivaría a alguien a tomar tanto esfuerzo simplemente para negar el agua a los sedientos? Jesús también pasó por hambre e incluso una de sus últimas palabras fueron: "Tengo sed." Juan 19:34 nos dice que después de que Jesús murió, "Uno de los soldados le atravesó el costado con una lanza, e inmediatamente En verdad, fluyeron agua y sangre."
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